“La poesía fue para ambas, el refugio donde lamernos las heridas, la tabla de salvación, la casa.” Carmen Matute en el ensayo AMADA, escrito en honor a Margarita Carrera.

Son tantos los elementos cautivantes de esta libro que resulta difícil escribir esta nota en términos breves. Empiezo por lo indispensable y esencial: gracias, Carmen Matute. De nuevo su escritura me ha conmovido, me ha prodigado el placer indiscutible de la buena lectura ¡me ha instruido tanto!
Un privilegio leerla, mi gratitud es inmensa.
“EL OFICIO DE ESCRIBIR” de CARMEN MATUTE (Premio Nacional de Literatura Miguel Ángel Asturias 2015), es una colección de ensayos sobre escritoras y escritores, sobre géneros literarios, artistas de otras disciplinas, sobre la vida, su gozo y su horror. Es tan evidente el profundo conocimiento de la trayectoria de los autores y de ellos mismos que Carmen logra despertar en el lector apetito de más, mucho más.
A veces, en medio del tesoro que representa aprender de cada tema desmadejado en la obra, surge un asombro incontenible por el uso que la autora da al lenguaje. Escribe una prosa tan hermosa que es necesario hacer una pausa. Respirar. Volver texto atrás y leerlo en voz alta. Es conmovedora y profunda, sostiene el hilo de su relato sin que una sola hebra quede suelta.
Leer los ensayos sobre Margarita Carrera o Luz Méndez de la Vega la convierte a una en testigo de una amistad, un respeto y una admiración tejidos sobre el manto sagrado de la poesía. Entre ellas reinaba una complicidad digna de sana envidia. Carmen hace honor a sus amigas del alma con cada uno de los laureles que se ganaron en una era en la que el oficio de escribir era campo minado para las mujeres y para quienes pensaban diferente.
Escribe con total sentimiento, desde el amor y desde la solvencia que el profundo conocimiento del oficio y de la persona otorga. También sacude emociones cuando escribe sobre Luis Alfredo Arango o Amable Sánchez Torres o Isabel Ruiz. Carmen sorprende y conmueve y conmueve y sorprende. Ejemplo de esto es el ensayo POETA DEL EXILIO. Una pieza en la que, desde los lazos poéticos y sanguíneos que los unían desde siempre, rinde un sentido y a la vez feroz homenaje a su hermano Mario René Matute.
Podría mencionar cada ensayo porque todos y cada uno abarcan importantes lecciones. El universal Pablo Neruda, Gabriela Mistral, el inmenso Alejo Carpentier, Tennessee Williams y tantos otros personajes habitan este libro, distintas ciudades son visitadas y tantos viajes al interior de la condición humana emprendidos, que antoja llamarlo un compendio esencial de sabiduría. No faltan las reflexiones sobre las denuncias que han agitado el quehacer literario en Latinoamérica, tampoco las denuncias en sí sobre crímenes ancestrales que aún suceden.
Desde el nacimiento de la poesía erótica en imprescindibles voces femeninas (Ana María Rodas, Delia Quiñónez, la misma Carmen, por mencionar algunas abordadas en el libro) hasta el Jazz y sus míticos ídolos, pasando por legendarios exploradores marinos, “El oficio de escribir” aborda tal variedad de temas que constituye una obra vital.
Resulta imperioso recomendar su lectura a todos. Sin embargo, y con urgencia escribo, para quienes vivimos en y morimos por el quehacer literario, este libro es lectura imprescindible.
Un portento su libro, Carmen, gracias por compartir sentimiento y conocimiento tan magistralmente.
“Yo no propongo una literatura de pancarta, pero sí una literatura que involucre un compromiso posible. Un compromiso moral al que debemos responder positivamente por el simple hecho de encontrarnos en la situación privilegiada que nos da el pertenecer a una élite educada.” Carmen Matute
