«You don’t get to choose if you get hurt in this world, but you do have some say in who hurts you. I like my choices.» Augustus
¡Qué cosa tan grande es «The Fault in Our Stars»!
Compré el libro para mi sobrina, debí imaginar que ya lo había leído. «Leelo Nic!» me dijo. No me quedó más remedio. Me tomó 3 noches y no lo olvidaré jamás. A pesar de ser una historia de amor joven, es la esencia del mejor de los amores. Si lo pensamos, a esa edad se es intenso, y cuando de enamorarse se trata aún más. No se piensa solo se siente.
Trae miel, trae limón y también chile. Es una novela que pica, arde y endulza.
A pesar de la brevedad extrema de la relación y del dolor (también extremo), es una delicia de lectura.
Bellos personajes, en todos los sentidos. Diálogos frescos y brillantes, jóvenes al fin. Creo que no veré la película. Me quedo con el sabor del papel -que se mojó con un par de lagrimones- y la sinfonía de la prosa, simple pero picuda, de Green.