«Luego vine a comprender que la escritura da calma a los tormentos del alma…» Violeta Parra
No me pidas que deje de escribir. No desees que abandone al teclado, al cuaderno. No me apartes del camino de tinta que me lleva y me trae. Por favor no pretendas que me extravíe en tal silencio.
Porque si renuncio a la palabra, a la luz de la idea, a la calma que habita en los párrafos, porque si doy mi espalda a la magia que surge en las esquinas de cada historia; porque si cedo, me fracturo sin remedio.