Y guardo esos sueños
transgresores
en un arcón secreto.
Osadías, escapadas y
hogueras indomables,
son mis sueños de escándalo
rutas imposibles hacia lagos de salvación.
Discretos navegan
-el arcón y los sueños-
en el río esmeralda que atraviesa mi cuerpo
y desemboca en el cenote
cristalino
donde me flota el alma.
Flota y baila
-mi alma insurgente-
en las aguas y en los fuegos
infinitos
de mis sueños transgresores.